Nishane Favonius es una fragancia masculina contemporánea que fue lanzada en 2021, destacándose por su complejidad olfativa y su capacidad para fusionar elementos frescos, especiados y amaderados en una composición que evoca elegancia, fuerza y sofisticación. Creada por la famosa casa de perfumería turca, esta fragancia ha sido diseñada para hombres que buscan un perfume distintivo, de alta calidad y con una presencia marcada que se mantiene durante todo el día.

Notas de salida

Nishane Favonius ofrecen una apertura vibrante y enérgica, que comienza con la frescura especiada de la pimienta rosa, que añade un toque picante y afrutado. El incienso, con su riqueza balsámica y ligeramente ahumada, aporta profundidad desde el principio, dando un aire de misticismo. La bergamota, con su frescura cítrica y efervescente, se combina perfectamente con el toque dulce y exótico del lichi, creando una apertura que es tanto vibrante como intrigante. Esta combinación de frescura y especias prepara el terreno para una evolución olfativa muy dinámica.

Notas de corazon

En el corazón de la Nishane Favonius las notas de corazón desarrollan una mezcla floral y especiada que es al mismo tiempo sofisticada y compleja. La rosa, uno de los ingredientes más clásicos y apreciados en la perfumería, se presenta aquí en una forma refinada, aportando una suavidad floral que se combina con la terrosidad y la profundidad del cipriol (también conocido como nagarmota), una planta que introduce un toque amaderado, ligeramente almizclado y especiado. Además, el geranio aporta un matiz fresco y verde, mientras que el abrótano, con sus matices herbales y ligeramente picantes, añade una calidad aromática y un carácter distintivo. Finalmente, la esclarea, con su toque ligeramente amargo y herbal, agrega un elemento de complejidad que realza la riqueza del corazón de la fragancia.

Notas de fondo

Las notas de fondo son donde Nishane Favonius realmente se asienta, revelando una base poderosa, cálida y amaderada. El oud, esa madera preciosa y compleja, le da una profundidad dramática a la fragancia, mientras que el pachulí, con su perfil terroso y ligeramente dulce, refuerza el carácter amaderado. El incienso, nuevamente presente en las notas de fondo, intensifica la riqueza de la fragancia con su misticismo y su aire religioso, mientras que el sándalo y el cedro aportan suavidad y estructura. El sándalo, en particular, le confiere una suavidad cremosa que equilibra las notas más intensas, y el cedro añade una sensación de solidez y claridad, que prolonga la presencia de la fragancia en la piel.

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