Louis Vuitton Ombre Nomade es una fragancia masculina lanzada en 2018, que captura la esencia de un viaje sensorial profundo y misterioso. Esta fragancia pertenece a la línea exclusiva de la casa francesa, conocida por su enfoque en la creación de perfumes lujosos y sofisticados. Louis Vuitton Ombre Nomade se destaca por su carácter envolvente y opulento, combinando ingredientes exquisitos que evocan una sensación de aventura, exploración y elegancia atemporal. Su complejidad olfativa crea una atmósfera única, perfecta para aquellos que buscan una fragancia que deje una huella memorable y cautive los sentidos.

Notas Olfativas:

Louis Vuitton Ombre Nomade  se abre con una mezcla poderosa y envolvente de madera de oud e incienso, que le otorgan una riqueza profunda y espiritual. El oud, conocido por su intensidad y su aroma amaderado-resinoso, es el corazón de la composición, aportando una fuerza inconfundible y un toque exótico que transporta al usuario a un mundo de misterio y lujo. El incienso, con su frescura ahumada y balsámica, intensifica esta sensación, evocando la tranquilidad de un incienso encendido en un templo lejano, aportando serenidad y profundidad a la fragancia.

En el corazón de Louis Vuitton Ombre Nomade , la rosa añade una suavidad floral que equilibra la intensidad de las notas amaderadas y especiadas. Su delicadeza contrasta y al mismo tiempo complementa la robustez del oud, aportando una sensación de elegancia y sofisticación. La frambuesa, con su dulzura jugosa, introduce una faceta frutal que ilumina la fragancia, proporcionando frescura y un toque de contraste que suaviza la riqueza de las notas más oscuras.

El azafrán se une a esta mezcla con su calidez especiada y ligeramente terrosa, añadiendo una dimensión exótica que refuerza la complejidad de la fragancia. A medida que la fragancia se desarrolla, el Amberwood y el benjuí crean una base cálida y resinosa que envuelve los sentidos. El Amberwood, con su suavidad ambarina y ligeramente amaderada, ofrece un fondo cálido y envolvente que se mezcla perfectamente con el benjuí, que aporta una dulzura balsámica y ligeramente vainillada.

Finalmente, el abedul agrega una nota ahumada y terrosa que le otorga al perfume un toque de misterio y robustez, cerrando con una sensación de lujo que perdura en la piel.

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